Lo repites y lo repites de forma mecánica hasta tres veces por semana, o quizás más, al terminar cada clase de yoga al mismo tiempo que juntas las manos en el corazón. Seguramente al momento de decir esta palabra en automático te genera un sentimiento de éxito o paz mental por haber finalizado tu rutina y concluir un paso importante de tu día. Pero, ¿sabes realmente qué significa Namasté?
No sólo eres tú, muy pocas personas, incluso las que se hacen llamar 'yogui', conocen el verdadero significado de esta palabra y es que va mucho más allá de un mero término. Namasté representa una filosofía de vida y tiene un significado espiritual sumamente profundo.
Así que, empecemos. Etimológicamente la palabra Namasté viene de dos raíces:
Si hacemos una traducción exacta de las dos raíces etimológicas, el significado de Namasté podría ser te saludo o me inclino ante ti.
Un dato curioso es que si nos fijamos, el “té” de Namasté es singular, por lo que en realidad debería ser utilizado simplemente para saludar a una sola persona. La forma correcta de usarlo de manera plural para saludar es “namo vaha”.
Actualmente, el término Namasté es tan famoso que se usa como saludo o despedida en muchos lugares del mundo. Se originó en la India y proviene del sánscrito antiguo, una lengua sagrada para todas aquellas personas que practican el hinduismo.
Un dato importante que muy pocas personas saben, es que Namasté es mucho más que un saludo. Representa una filosofía de vida que busca reconocer y honrar lo que somos y vemos en el otro. Dependiendo del contexto y del gesto que se hace al pronunciarla, la palabra puede tener muchos significados. Te explicamos los principales:
En un significado espiritual. En el hinduismo se cree en la existencia de una “chispa divina” en todas las personas, que está ubicada en nuestro corazón. Este saludo es una forma de reconocerla desde el alma, es decir “mi energía más alta saluda a tu energía más alta”.
Esta traducción es muy parecida a la anterior, pues de igual manera tiene un significado espiritual ligado al concepto de luz que existe en cada uno de nosotros. En sentido literal es la aceptación desde el alma de luz llamada atman, la esencia divina presente en cada uno de nosotros.
Continuando con el lado espiritual, existe otro significado aún más profundo, éste representa que todos estamos conectados y somos parte del universo, es decir “lo que a ti te hace feliz, a mí también me hace feliz” o “lo que a ti te afecta, a mí me afecta”. En ese sentido, todos estamos ligados y unidos.
Quizá éste sea el significado más conocido y usado sobre todo en las clases de yoga. Desde un punto de vista más práctico y menos espiritual, es una forma de expresar un sentimiento de gratitud. Aquí lo importante es que no solo se agradece al profesor que está impartiendo clase, también es importante agradecer a tu cuerpo por el esfuerzo que hace, a las personas que te rodean y a ti por regalarte un momento de relajación.
En otro sentido, que también es muy utilizado en las clases de yoga, esta palabra simboliza la importancia de dejar a un lado el ego mostrando una actitud de humildad, haciendo una conexión genuina con otra persona, más allá de las expectativas, pretensiones o enfoques sociales.
Además de estos significados, Namasté tiene algunas variantes dependiendo de la provincia de India en la que te encuentres como Namaskar, Namaskaara o Namaskaram. En general, todas tienen el mismo sentido de saludar pero de una forma un poco más formal.
Por si no lo practicas o simplemente tienes la duda, el yoga es un conjunto de disciplinas de tipo físico, mental y espiritual, que tienen como objetivo principal lograr el equilibrio entre el cuerpo y la mente para alcanzar la iluminación y la trascendencia, que tiene un origen hinduista.
El yoga busca el acceso a la conciencia suprema que nos lleva a la iluminación, a través de una serie de posturas, llamadas asanas, que se combinan con la práctica de ejercicios de respiración, llamados pranayama.
A través del yoga y la meditación, se busca conectar con el presente, liberarse de juicios, preocupaciones y cualquier situación que pueda perturbar nuestra mente. Para lograr ese estado, es necesario despojarnos de muchas cosas, entre ellas el ego.
Es justo aquí la razón por la que se usa la palabra Namasté después de practicar yoga, ya que su relación es más profunda que un simple saludo o despedida de cortesía y respeto. Su significado es una muestra de humildad para reducir el ego a la nada, reconociendo la "chispa divina" que todos tenemos y crear una conexión con uno mismo y los demás.
Cuando usamos la palabra Namasté de forma auténtica, conscientes de todo su sentido y propósito, es posible lograr un efecto que nos permite:
Generalmente el saludo Namasté se acompaña de una mudra (un gesto, considerado como sagrado hecho con las manos). En el hinduismo se considera que hay 24 mudras principales que se utilizan en la meditación budista y en el yoga.
El mudra que se utiliza en el saludo Namasté se hace con las palmas abiertas y unidas entre sí a la altura del pecho, en posición de oración, acompañado de una inclinación ligera de la cabeza y generalmente con los ojos cerrados. En algunas culturas se utiliza una inclinación más pronunciada que simboliza respeto.
Otra forma común de hacer este saludo es poniendo las manos juntas delante de la frente inclinando la cabeza y luego bajando las manos hasta el corazón, esta forma especial es considerada de profundo respeto.
Un dato importante es que en la India, es común que la gente te salude simplemente haciendo el mudra sin decir la palabra Namasté, pues va implícito al momento de hacer el gesto sagrado.